Crónica
Fundador:
Bernardo Carlos Casas Tlaquepaque,
Jal., 30 de abril de 2022
No.
75
El
Refugio, una joya que refulge
*fue
un hospital
*sufrió de
abandono
*hoy es Casa de
Cultura
El viejo
nosocomio de El Refugio en su tiempo fue un moderno hospital con todos los
adelantos novedosos de la ciencia médica del siglo diez y nueve. Su vocación
hospitalaria de caridad se vio opacada al tiempo del movimiento carrancista, al
apoderarse de la institución el gobierno. Los gobiernistas lo regresaron pero
luego las monjas josefinas trataron de quedarse con el edificio alegando
cincuenta años de servicio. Al quedar en el abandono Porfirio Cortés Silva lo
adquirió y lo convirtió en Casa de Cultura. En tiempos modernos, gente ajena lo
ha querido convertir en hotel, museo nacional de la cerámica, sucursal del
Colegio de Jalisco, pero su destino cultural prevalece gracias al esfuerzo
actual de personas como la directora de Cultura, Sara Susana Pozos Bravo y el
administrador Gabriel Pérez Padilla.
De derecha a
izquierda la presidenta Citlalli Amaya Luna y Gabriel Pérez Padilla
hojita de la Crónica
El trabajo de renovación de una joya
sólo la vive el orfebre; en este caso, la Joya de El Refugio, la trabaja un equipo bajo la dirección del joyero mayor
el Lic. Gabriel Pérez Padilla, quien una vez instalado en la silla de
Administrador del Centro Cultural El Refugio ha trabajado con esmero para
presentar ante el pueblo y los
visitantes una nueva imagen de El Refugio.
Jardines al ingreso que le dan frescor al lugar, códigos QR que le hablan al visitante de cada rincón, señalamientos claros, alarmas contra incendio, extinguidores y ahora, rehabilitación de fuentes.
Una fuente en
especial le significó tener que rastrear antiguos ductos de agua en el patio
del Mango, pero Ángel y sus muchachos, equipados con buenas herramientas y
mejor voluntad fueron vistos chamagosos de barro y todos mojados para revivir
una pila seca desde hace más de
hojita de la Crónica
treinta años,
que ahora tiene un chorrito que ha de crecer con el tiempo y la adecuada
presión hidrostática.
hojita de la Crónica
Es oportuno
hablar sobre el almacén de herramientas. Aquello era un galimatías, un
desorden. Lo recordamos bien no tenía principio ni fin. Hoy, de Gabriel para
acá, hay orden, cada cosa está en su lugar. Gabriel platicó que en un almacén
de herramientas y materiales hay que distinguir al menos tres áreas: la primera
es aquella donde se guardan materiales y herramientas de uso frecuente, la
segunda es un lugar donde se almacenan materiales y herramientas cuyo uso no es
inmediato, la tercera es un espacio donde se mantienen utensilios, aparatos,
piezas o enseres; al igual que sustancias, ingredientes o elementos de
poquísimo movimiento.
Eso es en
términos generales pero se puede hablar de tener en un espacio especial para
instrumentos delicados como pudieran ser aparatos de medición, como
calibradores, vernieres, básculas de precisión y otros artefactos frágiles.
Bueno, pues
hemos de saber que la bodega de herramientas y materiales de El Refugio, tiene
todo eso y además un espacio en el tapanco para comedor de los empleados de
mantenimiento. Hay tal orden que ahora es fácil localizar en forma “rápida y
furiosa” desde un clavo hasta una escalera, desde una tachuela hasta una llave Steelson.
La nueva
administración de El Refugio se auxilia de un programa que a nivel Estado se
conoce como JALISCO RETRIBUYE, del cual Nayely Ordaz Fernández nos platica que
el mismo proyecto en el municipio lleva por nombre EMPLEO EN TU COLONIA, y
consiste en invitar a personas que carecen de trabajo para que colaboren en
programas de mejoramiento en su propia colonia, barrio o delegación. Las
personas pueden aspirar, más tarde, a
tener un empleo formal en comercios o industrias pues ya llevan en su haber una
carta de recomendación, si su conducta fue del todo irreprochable.
Los vecinos
del entorno al Refugio, inscritos en este programa han tomado su papel con tal sentido
de arraigo, identidad y verdadero cariño por su comunidad que con el mismo
entusiasmo que limpian
hojita de la Crónica
una mancha
exterior de los pinta bardas, abrillantan un piso opaco del interior. Son ellos
los que hacen que El Refugio sea una joya que refulge.
Nosotros,
desde la Hojita de la Crónica felicitamos a todos los que engrandecen a San
Pedro Tlaquepaque con su trabajo diario.
*
YO CONOCI Y CONVIVI CON
PEPE LUIS
Por
Francisco Humberto González
Es muy
difícil describir o hablar de una persona sin
Caer en la
especulación o favoritismo, según la convivencia
Con dicha
persona, pues pueden omitirse cosas muy personales
Para ambas
partes mas no deformaran el ser de dicha persona
Pepe Luis,
era un seudónimo pues su nombre era José
López Martínez, nunca me comentó o nombró a sus padres,
tuvo un hijo al que nombró Francisco, la
gente llegó a confundirse diciendo que era yo dicho hijo pues nunca lo
conocieron, mas nunca lo vi convivir con El, solo en visitas esporádicas que le
hacía y solo para pedirle dinero.
Tenía por pareja a una Señora de nombre Refugio a quien todo el mundo
llamaba “Cuquita”, para mí siempre fue la Señora Cuca, gracias a ella que me
enseñó a cocinar hasta la actualidad me valgo por mí mismo para cocinar mis
alimentos.
Cabe mencionar que él fue mi mecenas en mis estudios Básicos (parte de
primaria y secundaria) lo cual paso gracias a mi maestra de sexto año La
Señorita Domitila Martínez que me recomendó con él, muy conocida en el pueblo
como la Señorita “Tila”, era su prima.
1
El me acogió
como su grumete doméstico, por lo cual
Llegue aprender muchas cosas que fueron muy provechosas
Para mi desarrollo en la vida, cuestiones de imprenta
ya que era
dueño de un periódico local de índole deportivo con el nombre de “Jon-ron” de
circulación semanal, iba Yo a veces a revisar y corregir la impresión del mismo
y venderlo el sábado por la tarde
hojita de la Crónica
Cuando había partido de beis-bol en el ya desaparecido
estadio Tecnológico (Av. Revolución y
calzada Olímpica).
Pertenecía al grupo de amigos y políticos del Señor Francisco Silva
Romero, en solo una ocasión se involucró en un puesto público del ayuntamiento
Municipal de Tlaquepaque más bien era apolítico y mucho se comentaba ¿pos de
que vivía? La Cuestión era que era miembro de Prensa Unida de Jalisco,
ostentando una licencia de locutor y
publicista, siendo el encargado de la publicidad de Laboratorios Picot en
Guadalajara y Tlaquepaque en el tiempo que salió al mercado el antiácido
estomacal “Sal de uvas Picot” en una
presentación en polvo para, disolverse en agua, con el slogan “El que espera
desespera” haciendo alusión a los ya existentes que venían en presentación de
una pastilla que duraba un tiempo en disolverse en agua, dicha Publicidad se
podía ver en los portales exteriores del Parían en su parte frontal exterior en
cada acceso de los que cuenta y en las fachadas de varias farmacias que
existían en ese entonces, dichos anuncios publicitarios se pueden apreciar en
muchas fotografías
2
De esa época (décadas de los años 50 y 60 del siglo
pasado).
Me hizo saber que el creó el personaje de
“Pancho Pantera” vendiendo los derechos de autor a dichos laboratorios, además
proveía de piezas artesanales de barro en gran cantidad ( jarritos, ollitas cafeteras”) a Tequila Sauza con el nombre empresarial y a
la cadena de restaurantes Cazadores, estos eran de una presentación de un
pequeño vaso con una deformidad que permitía asirlo con dos dedos su contenido
equivalía a un caballito y llevaba la leyenda de su creación “ me lo robé de
cazadores”, las cantidades de entrega rondaban en 500 piezas mensuales por
empresa.
Así como la publicidad que incluía en el Jon-ron y además era
corresponsal en Tlaquepaque del
periódico El Informador.
También ostentó el nombramiento
de primer Cronista de Tlaquepaque.
Francisco Humberto González
27 Enero 2022
Tlaquepaque,
Jalisco.
*
Tepatique
Ángel, curandero de Tuxpan
Tepatique
Ángel, curandero de Tuxpan, tiene para usted este remedio para controlar la presión arterial: se ponen a hervir 20 gramos de
alpiste en un litro de agua hasta que el alpiste reviente. Se deja en reposo
diez minutos y se toma todos los días. Tanto sirve el remedio para la alta como
para la baja.
*
Al Mariachi de mi tierra
Bernardo
Carlos Casas
Novena entrega
CAPÍTULO
XI
AÑO DEL
SEÑOR MARIACHI 45
E |
n los primeros días de enero de
1945 se anunció que las fiestas de Tamazula serían muy vistosas. El anuncio promete
que hará acto de presencia el Mariachi Vargas, puesto que algunos elementos del
conjunto son de este pueblo cañero. [1]
Recordemos que las fiestas de Tamazula son en enero.[2]
En
el inter algunas empresas empezaban a ponerse el sombrero de charro y presumir
mexicanidad, como Petróleos Mexicanos con su aceite para motores.
hojita de la Crónica
Un cartel de 1945 anuncia aceites y promueve el
mariachi [3]
A ratos el mariachi crecía, a ratos menguaba
Una
sección de un anuncio del Rhin, donde aparece Mario Alberto Rodríguez y Las
Norteñas acompañadas por el mariachi Guadalajara, cuando el mariachi crecía.
[4]
También
se llegó a presentar por esos días Gloria del Río, con el Mariachi Tapatío.
En
la novena convención nacional de Club de Leones que se llevó a cabo en
Guadalajara estuvieron en el teatro Degollado, y el mismo día en Tlaquepaque en
un festival con
peleas de gallos y un monumental
mariachi integrado por más de 90 músicos. [5]
hojita de la Crónica
Para 1945, existió una misión
cultural, encargada de llevar a la ciudad de México las mejores manifestaciones
culturales de Jalisco, el mismo gobernador Marcelino García Barragán, partió en
tren especial acompañado por su estado mayor. Muy importante es dejar asentado
que dentro del elenco de arte, la representación musical de Jalisco la lleva el
Mariachi Típico Regional. Un conjunto que había formado en fecha reciente. El
objetivo era la celebración de la Primera Conferencia Internacional sobre los
problemas de la Guerra y la Paz. Los mariachis fueron a tocar el jarabe
tapatío, según el octavo número del programa:
[6]
Y el mariachi seguía creciendo
Cuando
la Convención del Club de Leones el mariachi estuvo presente y los
convencionistas vinieron a Tlaquepaque y fueron agasajados con un mariachi
monumental de noventa componentes:
hojita de la Crónica
[7]
Cuando las ruidolas, el mariachi
menguaba
La
palabra “ruidola” no la consigna el diccionario, pero sí radiola. Un
amplificador de sonido adosado a un fonógrafo para reproducir las notas
grabadas en los surcos de aquellos discos de grueso acetato en cuyos micros
canales vibraban las notas musicales. Los aparatos se fueron
hojita de la Crónica
mejorando hasta llegar a ser
automatizados por completo. “Dieceras”, les llamaron también porque al contacto
con la moneda de 10 centavos, se operaba el milagro de oír música, en este
caso, de mariachi. La cuestión es que las instalaron en cada cantina del
Parián, y a muchos no les pareció. Como a muchos no les parece ahora que los
mariachis acorten las canciones y los meseros alarguen el cobro en el famoso
Parián. ¿Qué no? Pídale a los mariachis que le toquen “Hermoso Cariño” si usted
conoce bien la canción oirá como se comen la mitad de la hermosa introducción
musical, pero si lo notan a usted ya
borracho, y sigue pidiendo canciones, entre ellos usan una clave: “en Sí bemol”
y como no hay Sí bemol, eso significa que la canción que tocarán se recorta a
su mínima expresión, y, ¡Milagro! El cliente “borrachote” hasta les aplaude.
Que los meseros no cobran de más; está por demás la aclaración: hay testimonios
en todos los tiempos (vea el cuento “La Recia”, de su servidor, cuento, sí pero
cierto, sobre un turista que ya “contento” pagó tres veces la cuenta. PÁGINA
92, DE LO QUE ME CUENTAN, CUENTO [8]
Nadie me ha dicho que mienta, porque nadie lee, ¡Lástima! Se pierden el placer
malévolo de enjuiciarme. Pero, vayamos jubilosos al mariachi de aquellos días de
la Segunda Guerra Mundial. Lea la nota original es interesante.
Es
curioso que a los mariachis los siguen tratando de “murguistas” los fufurufos
y, sin embargo, los mismos comentaristas los defienden contra la invasión de
las radiolas.
hojita de la Crónica
[9]
El Departamento cultural, tenía su mariachi
hojita de la Crónica
En aquel entonces las funciones
de la actual Secretaría de Cultura estaban a cargo del Departamento Cultural,
que tenía por lo que se ve, su propio mariachi.
[10]
Los curas y las reatas
Hay
aspectos de la vida que nos dan una idea de cómo eran las demás cosas que
rodean a la tradición y costumbres, fuera del mariachi, o en derredor de éste.
El cura de San Pedro era bueno para el florilegio de la reata, además que
gustaba del mariachi, según se dio a conocer en marzo: vea la nota más
adelante.
Por lo pronto le comento que hay
curas faranduleros que están en el infierno, mientras hay curas muy rectos que
están en el cielo, porque al Señor nadie lo engaña.
Se acuerda del padre Miguel. Sí,
el mismo: Miguel Fernández, nunca llegó a cura porque para eso se requería
sumisión y Don Miguel no era sumiso, era zacatecano, como Monreal, y a los
zacatecanos nunca nos indican el camino, nosotros lo indicamos, ni la billetiza
nos doblega. A mí, desde mí rincón, me ofrecían un millón de pesos porque
firmara un documento diciendo que Tlaquepaque se había fundado en determinada
fecha, y como era una falsedad en beneficio de los traicioneros a Tlaquepaque,
casi perezco en la raya si no es
hojita de la Crónica
por la defensa que Jorge Montoya
y un grupo de personas escaso, me creyó, encabezado por la señora Elvira
Álvarez de Izquierdo que al ver mi fuerte contrapeso, intuyó la razón. Ella
convocó a historiadores de Guadalajara para que dieran su opinión y entre ellos
el padre Chuchín, el padre Chayo, Clever, Jose Muriá, Pedro Vargas, Luis
Sandoval, José Muro, Otto Shondube, Ramón Mata y otros historiadores, dijeron
que era falso, de toda falsedad que lo presentado por el sastrecillo valiente
(pobre sastre que mató a 7 moscas, como en el cuento pero que hizo creer que
eran siete cristianos)
Así los curas, así las reatas,
aunque al señor Obispo no le cuadre:
hojita de la Crónica
En Villa Corona… no quieren ser como en Tlaquepaque
(¡Por Dios!)
[11]
Ya no quieren mariachis
Hay
enemigos gratuitos del mariachi, al término de la Segunda Guerra Mundial. Es
natural, es el momento de las grandes bandas, como las que se muestran:
Beiderbeke Fletcher
Henderson
En Tlaquepaque, si bien no se tenía
predilección por esas músicas, si se tenía especial cariño por las orquestas, y
como se ha visto en el transcurso de estos apuntes, eran antepuestas a los
mariachis. Todo incide en que esta villa
hojita de la Crónica
alfarera
era un reflejo fiel del gusto musical de los tapatíos y así como ellos habían
introducido en esta villa el beis bol tres décadas antes, así habían rechazado el mariachi en su propia
tierra, Guadalajara, y en Tlaquepaque, por igual, donde tenían sus casas de
campo.
Beny Goodman
Duke Ellington
(fotos tomadas de
Google)
De esa
manera el hecho de rechazar en forma sistemática al mariachi, no era más que
indicio de los tiempos: no lo querían allá, tampoco acá. Y mire que forma tan
poco amable de rechazar a nuestra música nacional, no lo digo yo, lo dice El
Informador:
hojita de la Crónica
[12]
Fumaban los abuelos hasta en la cocina
No
había restricciones, fumaban las personas que tenían el vicio en todo lugar y
en todo tiempo. Los abuelos en su pantalón de mezclilla cargaban una lata
aplastada llena de tabaco picado, un manojo de hojas de maíz recortadas,
eslabón, el pedernal y yesca.
Era
toda una ceremonia la fumadera: sacar la hoja, darle un lengüetazo, acombarla
con los dedos, sacar la tabaquera y dosificar el tabaco en la hoja, hacerlo
taco, torcer los extremos, sacar el eslabón, el pedernal y la yesca hasta
producir una pequeña brasa en la yesca, arrimar el cigarro a
hojita de la Crónica
la incipiente brasa y darle
chupones al cigarro hasta tener la seguridad de que el pitillo de hoja, ha
“prendido”. Entonces sí, a ver quién gana, si lo locomotora o yo. Y se
promovían los cigarros como en las gráficas se ve.
De esa manera los Tecolotes
tocando y la “Trenidá” cantando. Y los fumadores, como en todo tiempo: echando
humo. Fue una época terrible. Los antros eran una nube de humo de cigarro, las
películas del tiempo basta ver a Andrés Soler, los cines estaban grises de
tanto tizne. Fue hasta hace una década, que la ley se impuso en bien de todos:
“En este lugar se prohíbe fumar” aun así, siguieron fumando y las cantinas que
lo permitieron y a “las cacharon” así les fue: pagaron una buena multa.
Hoy, Don Bello que no fumaba,
está dañado; sus pulmones desde 1982, hasta 2012, fumaron de todas las marcas.
. . era su cantina una fumadera de los mil diablos. La ley, mandó a los
fumadores “allá afuera” pero don Bello ya había chupado tanto, que ni cigarros
rusos ni polacos desconocía.
Todo tiene un fin, aquí termina
este capítulo, pero en el siguiente Los Tecolotes, que era un buen mariachi, si
no de Tlaquepaque, sí buen mariachi, se sigue perfilando y aquí, en San Pedro,
un Club llamado Los Gorgojos (que feo nombre)
hojita de la Crónica
contrata mariachis para que le
toquen el Jarabe Tapatío y la Jota Aragonesa.
*
LOS POLVOS DEL AMOR
A una cuadra del Parián existió la botica de Don Alfonso,
quién cada domingo hacía su “agosto” con la venta de polvos del amor. Venían de
las rancherías cercanas a San Pedro, infinidad de personas en edad de amar y se
llevaban su sobre de polvos mágicos, para atraer al ser amado.
Un día llegó un joven ranchero de sombrero y pistola y le
dijo a Don Alfonso:
— ¿Tiene polvos del amor?
— Sí, si hay ¿Cuántos quieres?
— Deme tres, pero póngales menos potencia.
Muy contento se fue el cliente y yo le pregunté a Don
Alfonso ¿Por qué eran tan potentes los polvos? Y dijo Don Alfonso que no tenían
potencia alguna, que eran puras aspirinas molidas.
*
Don Bello:
Nos has acompañado en los mejores momentos de la vida, así nosotros estamos
contigo en este instante.
Los Cronistas Honorarios y el
Cronista Municipal te deseamos pronta recuperación.
El barman don Bello (otro limón pal caldo)
hojita de la Crónica
A t e n t a m
e n t e:
Aldo Fierros, Carmen Ochoa, Eldiberto Ríos, Francisco González, Gabriel
Gutiérrez, Félix Montero, Ascensión Pajarito, Jaime Sandoval, Antonio Galán,
Karelin Velasco, Aurora Alcantar, Manuel Morales, Marcos Hernández, Mario
Morales, Rocío Durán, Isaac Padilla, Silvia Barbosa y Vicente Moreno. Guadalupe
Gutiérrez y Bernardo Carlos.
De todos nosotros recibe este
presentito
Esposa de El
Bello y Bernardo Carlos
*
La Hojita de la Crónica,
órgano cultural de la Crónica y los Cronistas Honorarios, sin frecuencia de
aparición. Misión: promover la Historia de Tlaquepaque. Fundador Bernardo
Carlos Casas, 8 de enero de 2020. Colaboradores fundadores: Vicente Moreno,
Juan Manuel, José Antonio Galán Amézquita, Bececé, Nödehar D´Sckrebir e Isaac
Padilla.
No. 75, 30 de abril de 2022. bercar_casas@hotmail.com
https://cronistabernardoccasas.blogspot.com/
Se respeta la libre expresión y
estilo de los colaboradores
[1]
Ibídem, 13 de enero de 1945.
[2]
Carlos Casas Bernardo, Tamazula ayer y
hoy, Sindicato de trabajadores de la Industria Azucarera y Similares de la
Rep. Mex., México D.F., 1989.
[3]
El Informador, 28 de enero de 1945.
[4]
El Informador, 11 de febrero de 1945.
[5]
Ibídem, 25 de abril de 1945.
[6]
El Informador, 23 de febrero de 1945.
[7]
El Informador, 25 de abril de 1945.
[8]
COLECTIVO: Lo que me cuentan cuento, coautor Bernardo Carlos Casas, página 92,
Prometeo Editores, GDL 2017.
[9]
El Informador, 23 de mayo de 1945. Nótese como sin dejar de ser murgas, los
mariachis ahora se prefieren en lugar de las ruidolas en Tlaquepaque, así
toquen aquéllos mal, y cobren como si fueran sinfónicas.
[10]
El Informador, 14 de junio de 1945.
[11]
El Informador, 11 de marzo de 1945. No hay de qué avergonzarse, cada pueblo
cultiva su cultura, unos entre aromas de alcohol, otros con olor a santidad de
las rosas.
[12]
El Informador, 1 de abril de 1945.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario