viernes, 20 de noviembre de 2020

La Hojita de la Crónica No. 28

 

                   la hojita de la

Crónica

Fundador: Bernardo Carlos Casas    Tlaquepaque, Jal., 22 de noviembre de 2020         No. 28

 

Secretos del oficio de Cronista (I)

Por NodeharD´Screbir

 

Si tú no hablas de ti mismo, nunca nadie hablará de ti, dice el refrán; pero yo voy a hablar de un tercero: el Cronista, quien en este año cumplió treinta años en el puesto. Por eso en este número pedí la anuencia del mismo para publicar, en su propio medio, estos datos que conozco de él. El no quería, pero, a tanta insistencia aceptó. Están en primera persona, contenidos en una nota de 119 páginas que mandó a los regidores cuando cumplió 30 años al servicio de la Crónica.

Bernardo Carlos Casas

En este número escribe Nodehar D´Skrevir

 

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Bernardo Carlos Casas

 

30 años como Cronista Municipal de San Pedro Tlaquepaque

J a l i s c o

 

 

 

 

 

 

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Antecedentes

 

PERIODISTA

“Como corresponsal para el periódico El Informador por algunos pueblos de 1985 al año 2000, publiqué más de 2000 notas. A San Pedro Tlaquepaque le corresponden alrededor de 100 y un reportaje completo “Tlaquepaque hace cien años”[1]. Colaboré para “Mi Tierra” de Los Ángeles, la revista “Jalisco y sus municipios”, “La Verdad” de Tlaltenango, Zac., y soy director editorial del periódico “Voz del Norte Jalisco”

 

PRIMEROS libros

 

“Mucho antes de ser nombrado cronista municipal de San Pedro Tlaquepaque, había publicado varios libros sobre historias de diversos lugares; por ejemplo: San Martín Hidalgo en el tiempo, Tamazula de Gordiano ayer y hoy, El Crucero de Santa María, Una ciudad amurallada Tlaltenango, Huixquilic, Parroquia de San Martín, Colotlán y su historia, Zapotlanejo, y otros más[2].

 

MIEMBRO DE ASOCIACIONES

“Ingresé a El Centro de Estudios Fray Antonio Tello, por invitación del doctor en historia Luis Medina Ascencio en 1975, organismo donde ocupé diferentes puestos: encargado de la correspondencia, tesorero, y director de la biblioteca.

“La Benemérita Sociedad de Geografía y Estadística, me invitó a pertenecer a ese organismo al cual ingresé, en 1987, con el

 

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trabajo[3] “Vida y obra de Ricardo Delgado Román” (un gran defensor del Lago de Chapala).

 

PRESENCIA COMO CRONISTA

 

“Fui cronista del municipio de San Martín Hidalgo, Jal., de 1985 a 1990. Los frutos fueron simples pero para la comunidad trascendentes. Escribí cuatro libros del lugar, y pude influir en su ánimo de los ciudadanos para que elaboraran un escudo de armas para su población, por todo lo cual fui nombrado “hijo predilecto”. El escudo logrado a mi idea es el que ahora distingue al pueblo[4]. Logré que algunos jóvenes se interesaran en la historia del lugar, y hoy han escrito sobre historia, tradiciones y personajes de su villa.

 

PRESENCIA EN TLAQUEPAQUE

“En julio de 1990, cuando el entonces presidente municipal,  lanzara una convocatoria para escribir sobre Tlaquepaque, el único que le tomó la palabra fui yo. Al año ocho meses de esa invitación pública, se presentó el libro “Tus Olorosos Jarritos…” el cual fue elogiado por la prensa, como “el primer estudio serio sobre la Historia de Tlaquepaque.” (Así lo dijo la prensa)

        “Poco a poco se desgranará la mazorca e iremos viendo detalles en forma cronológica, mientras tanto justo es decir, como Ricardo Preciado Partida, quien al saber mi inquietud de escribir un segundo libro, me dio un lugar físico en un rinconcito, en la sala de regidores. Él era vice presidente con el presidente D. Eduardo Riverón Gámez. El señor Preciado sólo me conocía por la referencia del libro Tus olorosos jarritos.      “En seguida exhibo el documento donde el presidente en turno invita a escribir sobre Tlaquepaque.

        “Ver tercer párrafo, sexta línea: “reconoció que poco se ha escrito sobre Tlaquepaque, por lo que hizo una exhortación a los

 

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escritores a que se involucren en esta gran tarea histórica y cultural”.

       

DIA EN QUE SE HIZO LA INVITACIÓN A ESCRIBIR SOBRE TLAQUEPAQUE.[5]

    

Esto sucedió el 23 de julio de 1990.

 

 

 

PRESENTACION DEL LIBRO (texto)

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Primera parte

LIBROS SOBRE TLAQUEPAQUE, editados sin tener nombramiento DE CRONISTA.

 

 
Tus Olorosos Jarritos, Imprenta Annel’s, 8 de febrero de 1992, 2000 Ej., 182 p. Guadalajara.[6]

 

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        “A partir de ese momento los periodistas empezaron a entrevistarme y me llamaban cronista. En verdad hacía ese papel sin el reconocimiento oficial. Hay varios testimonios en la prensa de esos días, lo cual veremos adelante.

 

Segundo libro

“El presidente D. Eduardo Riverón Gámez[7], más de fuerza que de gana, autorizó el libro “Estampas de Tlaquepaque”. Su tesorero, quiso compensar mi esfuerzo, y me indujo a registrarme en Hacienda, cosa que poco me favoreció, pues por un salario mínimo hube de ser causante. Ya casi me muero y es hora que Hacienda, me requiere.

        “Cuando el libro se presentó en el mismo lugar que el anterior: la capilla de El Refugio, Riverón lloró de emoción porque encomiaron en el presídium su magnífica difusión cultural. Me dio un abrazo muy sentido.

        “Seguía yo haciendo el papel de cronista, sin nombramiento que me avalara.

        “Le dijeron a Riverón que nombrara cronista, y en la terna que le presentó su incondicional y alumna Benita Camacho Buenrostro, auxiliar de la Oficialía de Cultura aparecía, por mandato de Riverón, en primer lugar Enrique Silva, hijo de Fernando Silva, a quien Riverón quería favorecer. Yo tuve acceso al escrito; Enrique tenía bártulos de sobra. Seguía José María Moreno, con menos que Enrique, pero más que yo, que aparecía en tercer lugar, sin ninguno de aquellos utensilios académicos a mi favor. Era la famosa terna, tan usada en esos días para camuflar el rechazo de dos personas y la aceptación de otra.

        “En la junta de Cabildo presentó Riverón su proyecto de cronista y hasta los regidores de su partido, lo rechazaron. Por unanimidad dijeron que el cronista debería de ser Bernardo Carlos Casas, dados los dos libros sobre Tlaquepaque. La respuesta del alcalde  fue “dejamos entonces las cosas para otra ocasión”. (Documento en manos de Ricardo Preciado Partida, regidor con Riverón)

La ocasión llegó pero ya no en su administración.

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Estampas de Tlaquepaque


         Unidad Editorial del Gobierno del Estado de Jalisco, julio    de 1994, 2000 Ej., 200 en pasta dura, 196 p., GDL.

 

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 El día de la presentación del libro Estampas de Tlaquepaque

 

        “Mientras tanto urgía tener una sede para las oficinas de Catastro Municipal. La Casa López Portillo en Tlaquepaque, llena de libros, guardaba también en cajas estrelladas el archivo municipal. Ordenó Riverón que se desocupara el inmueble. Del destino de los libros nadie sabe y ahí estaba en latín la Suma Teológica de Santo Tomás de Aquino en cuatro gruesos tomos y 1500 libros más, los cuales yo vi uno por uno, buscando datos para “Estampas de Tlaquepaque”. El archivo fue sacado caja por caja al quemadero. Los libros no hablaban del tema que yo buscaba, pero en el archivo había manuscritos del anterior cronista José López Martínez, muy valiosos que se perdieron por igual. Muchas fotos y tesis sobre el mercado, de jóvenes postulantes a profesionistas. En ese instante:

        “Le hablé a Riverón, le dije que el archivo que estaba mandando al cadalso, “fue en el que me basé para el libro que a usted tanto le gustó y por el que recibió felicitaciones; le sugerí  que mandara al Refugio esos papeles, que yo los guardaría bajo el sótano del teatro”. Me hizo caso y son los papeles que quedaron se inició, el hoy, Archivo Histórico Municipal, como ya lo veremos.


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        “Riverón, al paso de los años, ya sin la “corona de alcalde,” y al verme en C 7 cada semana en el programa Hablemos de Tlaquepaque  me encontró y me dijo: “Como lamento no haberte apoyado en mi tiempo”. Ya ni llorar era bueno.

        “Todo llega y todo acaba. Riverón llegó al fin de su tan desprestigiada administración. Ganó el PAN.

 

Con el triunfo del PAN las cosas medio cambiaron.

 

        “Don Marcos Rosas Romero, el primer presidente panista, me identificó como priista colado de las anteriores administraciones. Eso me dijo. Por otro lado, Alfredo Barba Hernández me dijo un día que yo ya era panista. Yo ni colado ni priista; tal vez cronista. Llevaba  5 años con el papel de cronista, sin ser ni colado ni priista, sólo cronista. Si fuese “colado”, por qué el PRI no me dio nombramiento. Si fuese panista, por qué el PAN no me daba el nombramiento. Don Marcos me dijo: sí, a tu proyecto; es decir, sí a la propuesta referente a un tener un libro por cada tema diverso de Tlaquepaque; sólo, y sólo sí,  le presentaba el primero sobre Santa Anita,  para el dos de febrero. Y, además —me dijo—, “quiero que figure en tu libro mí Circulo de Estudios Históricos de Tlaquepaque”. Faltaban mes y días. Eran los últimos de diciembre, todo mundo de vacaciones. Era tarea imposible. (continuará)

 

*

El Norte de Jalisco

Por Nodehar D´Skrevir

 

El Norte de Jalisco sigue ejerciendo en nosotros un cierto imán que por sus fuerzas magnéticas impregnadas de cultura, que nos jalan hacia allá.

En la “capital” de los pueblos del Norte de Jalisco —Colotlá— nacióel fundador de una de las Iglesias mas populares del mundo: La Luz del Mundo.

 

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Es, Colotlán, el lugar de nacimiento de Victoriano Huerta, a quien la nación detesta, y muy bien detestado esté por su mala acción de ser el actor intelectual de la muerte de Francisco I. Madero, y Pino Suárez; pero, muy mal estudiado está, porque dentro de todo, fue quien quiso, antes de Zapata repartir la tierra en forma mejor que lo hicieron los revolucionarios, pues la entregaría a los campesinos a un largo plazo de pago, pensaba en 50 años, de manera que los trabajadores del campo le tuvieran amor a su tierra que jamás habían tenido, pues bien sabemos que lo que cuesta se cuida, lo regalado, se descuida, y descuidados estuvieron muchos campos regalados, pocos ejidos lograron cultivar la tierra como en tiempos de la hacienda. Elevó a grado de Secretaría, la Agencia de Agricultura que operaba desde don Porfirio y que Madero no vio justificado que pasara de ser una Agencia dentro del la Secretaría de Fomento. Y… más cosas que se pueden platicar.

 

Antes de llegar a Colotlán habrá que pasar por Tlaltenango en el Estado de Zacatecas


 

a Hojita de la Crónica, órgano cultural de la Crónica y los Cronistas Honorarios, sin frecuencia de aparición. Misión: promover la Historia de Tlaquepaque. Fundador Bernardo Carlos Casas, 8 de enero de 2020. Colaboradores fundadores: Vicente Moreno, Juan Manuel, José Antonio Galán Amézquita, Bececé, NödeharD´Skrebir, Isaac Padilla.  No. 28, 21 de noviembre de 2020. bercar_casas@hotmail.com

https://cronistabernardoccasas.blogspot.com/

Se respeta la libre expresión de palabra de los colaboradores



[1] Las notas están firmadas como El Corresponsal. El Informador nunca aceptó nombres de los corresponsales de ningún lugar del Estado, ni de otros Estados. Todos éramos “El Corresponsal”
[2] Cuando se requiera se pueden mostrar.
[3] El trabajo de ingreso se publicó; un hijo de don Ricardo, Daniel, tiene varios ejemplares que actualizó y reeditó.
[4] Se lanzó un concurso entre preparatorianos y ciudadanía en general. Asistieron los sábados a sesiones sobre heráldica y se prepararon para concursar. Se presentaron 27 trabajos, el ganador fue Fermín Quintero.
 
[5] Diario El Informador, 23 de julio de 1990
[6] VER periódico El Informador, 28 de marzo de 1992.
[7] Eduardo Riverón Gámez, presidente municipal 92-94

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